10 de abril 2019

El golpe más difícil del golf: El swing

El golf es una práctica deportiva con mucha carga física que sin los cuidados adecuados puede provocar importantes lesiones. Unos buenos hábitos técnicos y una adecuada forma física pueden evitar lesiones focalizados en alguna parte del cuerpo: el codo, la espalda o la muñeca son algunas de las zonas más afectadas.

El golpe de swing en el golf es muy complejo desde el punto de vista físico. La columna se expone a un giro axial, compresión, latero flexión y movimiento antero-posterior. La mayoría de problemas de espalda que sufren los golfistas tienen su origen en las altas velocidades de rotación que debe soportar la columna vertebral durante el swing.

En este caso, la torsión del cuerpo está destinada a conseguir la energía suficiente que requerirá este golpe. Un 50% recae sobre la pelvis, donde de los 90º de torsión, 35º son ejecutados por la columna dorsal baja, finalizando con el desplazamiento del omoplato o escápula sobre el tórax. Además la parte interna de la rodilla también se ve implicada al convertirse en un eje de rotación. Distensiones de ligamentos o lesiones en el menisco son algunas de las lesiones fruto de la práctica de este golpe sin las posturas adecuadas.

Deberás evitar el over swing, es decir, doblar el brazo o dejar caer el palo en el tope del swing, con lo que se acaba perdiendo el control de la cabeza del palo. Las causas son varias pero la más habitual es la sobrecarga del codo. Para mejorar el over swing, se debe reducir la carga del codo mediante una corrección práctica, aprendida y rutinaria. Enseñar al codo a girar hasta llegar a un tope que no podrá superar.

De la misma forma, debemos mantener el control de nuestros movimientos, solo así conseguiremos ralentizar nuestro back swing y evitar numerosas lesiones irreversibles.

El cuanto a la parte inferior del tronco, debemos evitar el desplazamiento lateral. Mantenerla lo más quieta posible, posibilitará una buena plataforma para el giro de la parte superior.

Por último, es muy importante mantenernos erguidos durante los instantes posteriores al golpe, solo de esta forma conseguiremos mantener una buena postura y habituaremos al cuerpo a conseguir golpes sinceros sin necesidad de dolores y lesiones constantes.

Las malas prácticas pueden ser ocasionadas por insuficiencias biomecánicas del swing o por una baja condición física. Wunder Training propone una serie de entrenamientos adaptados a tus necesidades: dos sesiones de 60 minutos a la semana, además de una sesión de fisioterapia y otra de ejercicios adecuados a tus requerimientos según la práctica deportiva que lleves a cabo y las necesidades físicas que demande la misma. Podrás llevar a cabo entrenamientos de fuerza –ayudándote a proteger mejor huesos, articulaciones de manera que se reduzca el dolor y las lesiones–, resistencia –que mejoraran tu resistencia cardiovascular y aumentaran la potencia, dando como resultado una mejor condición física–, y finalmente de movilidad –centrados en la flexibilidad y la movilidad funcional y articular.

De esta forma y sumado a nuestros consejos para golfistas sobre cómo realizar el movimiento del swing de una forma más adecuada no tendrás problema para disfrutar de tu deporte sin problemas ni molestias.

Para más información: Wunder Training

 

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