05 de abril 2021

“Vivo mucho el golf, trabajo duro cada día y me encanta ganar”

¿Cómo definirías el inicio de la temporada 2021?

La verdad es que muy bueno. No sé si me lo esperaba pero lo cierto es que he trabajado muy duro, para lograr un swing muy estable, y los resultados han llegado.

 

En tu primera victoria, en el Southwestern Invitational, arrasaste. ¿Te sorprendió?

Sinceramente, no me sorprendió tanto. Sé que cuando tengo mi semana, las cosas me vana ir bien y me salió todo. Le si bien al drive, y además con mucho viento, con el que siempre me siento cómodo. Fui paciente, muy ordenado todo mi juego desde el tee. Lo que realmente me sorprendió es que sacara nueve golpes al segundo.

 

La segunda, en el Ari Invitational, en Hawai, también fue clara…

En ese torneo, el nivel no era tan alto y ya tenía el reto de ganar a mis propios compañeros. Aunque recuerdo que no todo me fue tan bien excepto al final. A falta de cinco hoyos iba un golpe por detrás, pero logré cuatro birdies seguidos y acabé ganando de cinco. Para mí, fue una victoria importante porque no desplegué mi mejor juego, pero fui capaz de aguantar y ganar al final

 

¿En busca de la tercera consecutiva, te presionó el hecho de que podías igualar un resultado que no conseguía los Sun Devils desde Phil Mickelson?

Sinceramente, no. Lo que si es raro es que antes del torneo tu nombre circulara por las redes o que la gente escribiera de ti. Entendí que estaba haciendo las cosas bien. Empecé bien en La Quinta, pero en los días siguientes no lo hice bien desde el tee y el resultado no fue malo, pero no gané.

 

¿Has vivido muy diferente tu llegada un año atrás, a ahora, no?

El año pasado solo pude estar dos meses y pico, ya la verdad es que llegué un poco perdido. Alejandro Del Rey me ayudó mucho, hizo un poco de ‘padre’ y me fue muy bien. En el primer torneo, me forré de golpes, me acuerdo. Para jugar aquí, hay que conocer un poco los campos, el tipo de hierba, y todo era nuevo para mí.

 

¿Tus éxitos, crees que han sorprendido a tu propio equipo?

No lo sé, aunque tampoco esperaba yo mismo ser el mejor de mi equipo. Yo trato de trabajar mucho y hacer las cosas bien, y trato de jugar para el equipo y para mí. Vivo mucho el golf y me encanta ganar y lo saben.

 

¿Hay mucha competencia con tus compañeros?

En España es muy habitual jugar por equipos, y aquí no tanto. Pero solo tengo palabras de agradecimiento a todos ellos, porque se han preocupado mucho por mi y celebran las victorias personales como de equipo. Son muy majos.

 

¿Estas victorias han cambiado en algo ti?

No tengo que cambiar nada, simplemente hacer mi juego, jugar centrado y hacer lo que toca. Mi punto débil son las salidas, y se me da bastante bien sacar la bola del rough. Es muy importante ir recto y estoy centrado en dale bien con el drive y coger las máximas calles posibles.

 

¿Te ves ganando más esta misma temporada?

Si, ¿por qué no?. Tengo el nivel necesario para ganar así que lo voy a intentar más veces.

 

¿Sigues unido a tu entrenador en Barcelona?

Si, con Joan bronchales hablamos a menudo y le envío vídeos y los comentamos. Creo que he evolucionado con mi swing. He visto la importancia de los pares 3, que son muy largos aquí y jugar las bolas a la calle. Ahora tengo un swing más estable y eso es trabajo de entrenamiento.

 

¿Has conocido algunos profesionales aquí?

A Jon Rahm lo conocí el segundo día de llegar aquí. Es muy buen tío. Me felicitó por una de mis victorias. A Mickelson no lo he visto nunca, pero si a Paul Casey y Pat Pérez, que vienen a entrenar a nuestras instalaciones que son auténtico lujo.

 

¿Has seguido la trayectoria de Edu Rousaud?

Edu siempre ha sido amigo mío más que rivales. A todos nos gustaría jugar un US Open como él tuvo la oportunidad de hacer. Me alegro por cómo le van las cosas y el paso que está a punto de hacer.

Yo, cada día lo veo más cerca, aunque todavía me quedan un par de años. El proceso que estoy siguiendo me va bien y no tengo prisa, pero tampoco sin pausa.

 

¿Encuentras a faltar Barcelona?

En Estados Unidos hay, como en todas partes, cosas buenas y malas. Echo en falta la buena comida mediterránea y me va bien ir para desconectar un poco. Aunque aún tardaré unos meses en ir. Primero tengo los Nacionales, y el 7 de junio, disputaré la previa del US Open. Del 11 al 13 de junio, la Palmer Cup en Chicago, y luego ya pensaré en volver a casa.

 

¡Pues mucha suerte en tu segundo año y gracias por atendernos!

¡Gracias a vosotros y un saludo desde Arizona!